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El consejo directivo de Pescanova dijo que intenta proteger la continuidad de la empresa. (Foto: Stock File)(Foto: FIS Stock)
Pescanova pide concurso voluntario de acreedores
ESPAÑA
Friday, April 05, 2013, 23:00 (GMT + 9)
Pescanova solicitó un concurso voluntario de acreedores “en aras de la preservación de la continuidad empresarial”. La compañía gallega tomó esta decisión al no poder alcanzar un convenio a corto plazo durante una reunión extraordinaria de más de 13 horas con la banca acreedora en Chapela, Redondela.
De acuerdo con lo informado por la agencia EFE, la multinacional también pretende proteger “los intereses afectados” por la grave situación financiera que atraviesa.
Según un comunicado presentado por la empresa a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), sus directivos reconocen que su situación financiera presenta “riesgo de deterioro”.
De todos modos, Pescanova tiene “la firme voluntad” de presentar en el curso del procedimiento una propuesta de acuerdo a sus acreedores que “garantice la salvaguarda de los derechos e intereses” de sus trabajadores, acreedores y accionistas.
La multinacional también busca “la gestión continuada”, añadió en el texto dirigido a la CNMV.
El consejo también resolvió pedir la revocación del nombramiento de BDO como auditor para la verificación de las cuentas anuales individuales de 2012 de la firma española.
Según fuentes cercanas a Pescanova, BDO no hizo bien su trabajo de análisis contable, informó el diario El País.
"Al amparo de lo dispuesto en el artículo 266 de la Ley de Sociedades de Capital y sobre la base de que concurre justa causa, el Consejo de Administración ha acordado solicitar al Juzgado Mercantil competente la revocación del nombramiento de BDO Auditores”, informó la multinacional.
El auditor todavía no realizó comentarios al respecto.
La deuda total de la compañía asciende a EUR 2.500 millones, según los datos del Centro de Información de Riesgos del Banco de España.
Pescanova había convocado un consejo extraordinario para ayer, el segundo en apenas tres semanas, con el objetivo de que se aprobaran los nuevos estados contables del año pasado, es decir, la deuda reconocida y la supuestamente oculta.
"El consejo se ha convocado ‘in extremis’ ayer a última hora, porque el viernes es la fecha tope para tener reformuladas las cuentas y remitirlas a la CNMV”, dijeron fuentes conocedoras de la convocatoria a la agencia Europa Press.
Además, a fines de marzo, la CNMV resolvió que la compañía podía entregar las cuentas del segundo semestre de 2012 hasta el 5 de abril. Este plazo implicaba una prórroga del establecido en la primera comunicación, que especificaba el 23 de marzo como fecha límite para que la multinacional hiciera públicos sus nuevos estados contables, tras reconocer un desfase entre la deuda que tenía auditada y la real.
Al no poder entregar las cuentas del año pasado -tenía tiempo hasta el 28 de febrero-, Pescanova había solicitado primero un preconcurso de acreedores, intentando renegociar la deuda con la banca.
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Por Analia Murias
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www.seafood.media
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