Imagen: Conarpesa / FIS

Langostino - ´No podemos seguir con políticas obsoletas y estúpidas´

Fernando Álvarez Castellano, otro referente del sector langostinero, habló sobre la situación actual de los mercados y los cambios que es necesario realizar en la manera de producir para evitar que el precio de este producto siga cayendo. Preocupación por la delicada situación de varias empresas españolas.

El presidente del Grupo Conarpesa, Fernando Álvarez Castellano, también dio su opinión sobre los desafíos que presenta el mercado a los empresarios langostineros. Propietario de una flota compuesta por barcos fresqueros y congeladores, no le preocupa el precio que pueda tener el langostino fresco de cara a la próxima temporada y ve en este producto una ductilidad acorde con los nuevos hábitos. Sin embargo, para el congelado a bordo considera que es necesario cambiar desde el barco la forma de tratarlo, lo que implica negociaciones con sindicatos y con funcionarios, que espera se renueven en tres meses para poder tener las discusiones y el cambio de políticas que hoy considera imposibles y que, de continuar, nos arrastraría hasta tener para el langostino salvaje y natural congelado a bordo, un precio tan bajo como el del vannamei.

Otro tema que preocupa a nuestro entrevistado es la delicada situación que están atravesando algunas grandes empresas españolas, que ha llevado, por ejemplo, a la presencia de manifestaciones contra la reducción de personal, en principio de unas ochenta y cuatro personas, en la puerta de la feria Conxemar.

“Lo más feo que hemos visto durante Conxemar fue el piquete que le hicieron en la puerta a Pescanova, esas cosas en España no pasan y que pase no es bueno”, comienza diciendo Fernando Álvarez.

REVISTA PUERTO: Se ha escuchado de situaciones complicadas en varias empresas.

FERNANDO ÁLVAREZ: Exactamente, y se ve que habrá una sucesión de hechos que no están nada buenos, porque al final nos salpican a todos porque los bancos se asustan, no le dan financiación a la pesca, puede pasar como hace años que la pesca fue mala palabra… Por eso que pase este tipo de cosas con empresas grandes no está bien. Nosotros económicamente somos sólidos, los socios de España también, no tendría por qué afectarnos, pero no deja de ser una señal de alarma para los bancos, en empresas como la nuestra de España que tiene líneas de prefinanciación, los bancos empiezan a cuestionar sobre los balances, cómo será el año que viene y así. Para mí lo peor que he visto en la feria fue el piquete de Pescanova.

RP: ¿Cómo se hace para revertir la situación de baja demanda de pescados y especialmente de mariscos?

FA: Hay una cosa clara, el consumo está cambiando, cada vez se va a consumir menos entero. Mercadona y otras superficies están pidiendo el langostino entero pero que le hagamos una raja arriba en todo el lomo y le saquemos la vena, una locura. Pero bueno, la gente va a eso y quiere easy peel y quiere langostino con cabeza, timón y sin cáscara en colas para Alemania, está claro que la tendencia está cambiando y vamos a eso, a vender cada vez menos entero y cada vez se va a vender más producto de final de góndola para el consumidor.

Fuente: Conarpesa

RP: Conarpesa hace fresco y congelado, en el fresco puede ser más fácil de lograr, ¿pero en el congelado cómo se hace?

FA: Sí, en el fresco es algo fácil de lograr, en el congelado va llegar un momento, que ya casi está pasando, que el fresco va a dar más que el congelado, hasta quizás pueda llegar a valer más porque no tenés problemas de reproceso y es mucho más fácil tomar un langostino fresco que tomar un langostino congelado a bordo y descongelarlo para procesarlo, como ya se está haciendo. Wofco ya lo hace, lo procesan en Vigo, descongelan el langostino y lo ponen en cajas de cuatrocientos gramos con una tapita para poder abrir fácil.

RP: ¿Dan los costos para hacer un reproceso en España? 

FA: Dan porque el cliente que los compra está dispuesto a pagar esa diferencia. Desgraciadamente vamos hacia eso, el problema que tenemos nosotros es que de langostino salvaje somos los mayores productores a nivel mundial y no es fácil llevar 100 mil toneladas de langostino y hacer ese tipo reproceso. A mí me han pedido unas muestras, pero pon que me piden 200 toneladas, cómo hago, cómo, cuándo y de qué forma lo hago. Pues tarde o temprano, aunque algunos se nieguen, vamos a tener que empezar a adaptarnos con los congeladores a ese cambio, como poder traer más colas, hay que facilitar ese trabajo, tomando todas las medidas para que no se tire nada al mar, que de las cabezas se haga harina, no quedará más remedio. Nosotros hemos hecho pruebas con empresas de sopas para hacerlas con las cabezas de los mariscos, hay que buscarle esa vuelta. Hay que dejarse de la estupidez del 20 por ciento de cola que parecemos nenes en el colegio y abrir la mente y pensar que se puede traer, por decir una burrada, la mitad cola y la mitad entero y las cabezas ya destinadas para un mercado que las añadirá a una sopa o lo que sea con un precio de exportación. Pero bueno, el tema será cambiar la cabeza de varios.

Fuente: Conarpesa

RP: Claro, pero eso va a implicar negociaciones con los sindicatos y funcionarios.

FA: Estoy absolutamente convencido de que habrá un cambio de todo, Subsecretaría de Pesca, ministerios, va a volar todo y que con la gente que venga se podrá tener una mesa de trabajo para encarar ese tipo de cambios. Hoy es imposible porque hay toda una puja en la que se mezclan temas personales en medio, antes podíamos traer 30 por ciento de colas y ahora el 20 por ciento y eso es porque hay un tema personal conmigo y por un tema personal nos estamos quedando atrás y nos están pasando como alambre caído. Si quieren seguir así sigamos, pero tres meses, en tres meses se acaba y habrá que hacer una mesa con los sindicatos.

RP: ¿Son factibles las negociaciones con los sindicatos?

FA: Al SOMU no le va a preocupar mucho lo que hagas a bordo, otra cosa son las plantas. Habrá que hacer una revisión de convenios como mínimo. Hay que empezar a ver que los barcos van a tener que traer los productos ya de otra forma, yo dejaría de hacer la caja de dos kilos. De hecho, la caja de dos kilos no se vende más, en los supermercados los semidescongelan…

Fuente: Conarpesa

RP: Nadie está dispuesto a desembolsar 20 dólares en una compra familiar.

FA: No lo gastan, pero, además, quién se lleva dos kilos de langostino a la casa. Antes lo hacían para las fiestas, pero si queremos que el langostino sea un producto de consumo diario como es ahora en China, tenemos que empezar a dar envases más fraccionados. Si la gente quiere pagar la calidad del congelado a bordo, también se lo tienes que dar fraccionado. No digo que hagamos cajas de cuatrocientos gramos en los barcos porque es muy difícil, pero hay que buscar la forma de facilitar las cosas y luego en tierra hacer lo que resta.

>-- Fuente: Conarpesa

RP: ¿Cuán importante es trabajar en acuerdos comerciales que bajen los aranceles de ingreso?

FA: Muy importante. El costo de langostino de los barcos con los gastos indirectos, lleva veinte años siendo el mismo en dólares. Poniendo los costos de planta, administrativos, todo, son 6 dólares y no estamos vendiendo a 6 dólares. No es culpa de Argentina, no es culpa del langostino, es culpa nuestra. Hay un volumen muy grande, pero si a ese volumen, descomprimes una parte para ir a otros mercados, que es lo que demandan, que hoy tienen al vannamei y nosotros podemos entrar con productos de langostino argentino, descomprimes en un lado y ganas en el otro. Pero si seguimos con políticas obsoletas, estúpidas y sin razonar en una mesa de diálogo, el año que viene valdrá cinco y al año siguiente valdrá cuatro como el vannamei. Si eso es lo que queremos hacer ahí vamos a llegar.

RP: ¿China está demandando estos cambios en el producto o todavía puede funcionar el entero?

FA: China todavía puede funcionar porque culinariamente están introduciendo una clase media que no existía, están comiendo langostino entero como nosotros hace treinta años, pero van a ir hacia donde vamos todos y van muy rápido. Es como la inteligencia artificial, ellos van a ir evolucionando mucho más fácil de lo que lo hicimos nosotros, viajan al mundo, ven lo que hay y van a ir a los productos elaborados que se están demandando en este momento en Europa, terminados para comer. Mientras nosotros seguimos congelando entero a bordo y creemos que hacer productos no tiene sentido y en las ferias lo ves en todos lados, pues eso es lo que va. De qué forma, cómo lograrlo, cómo incentivar… Para eso está el gobierno que debiera dar un reintegro a quien haga producto y al que mande entero no, a quienes hacen producto hay que premiarlos, hoy en lugar de premiar se castiga.

Autor: Karina Fernández | Revista Puerto

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